El pasado viernes, "21 días" se trató de las familias pendientes de desahucio y fue una llamada de atención para todos. Pasaban los minutos y sin saber por qué, no podía parar de llorar.
Entre uno de los casos, se encontraba el de Carmen, madre de familia, con dos hijos que vivía pendiente de la orden de desahucio pues no podía pagar el mes de la casa en el que vivía de alquiler. Durante cerca de 10 días, fuimos testigos de su día a día, de su coraje... De como se vive cuando apenas tienes para vivir.
¿Alguna vez has pensado en lo afortunado que eres? Es precisamente por esto por lo que no podía parar de llorar. porque me sentía culpable, aunque aquella historia no me tocase de cerca. ¿Cómo es posible que haya familias que apenas tengan para comer y tú, te andes quejando cuando te ponen la comida y no te gusta lo que hay? Me sentía culpable, pues yo siempre me fijo en los que tienen más, y nunca en los que tienen menos.
Es realmente duro ver la cara que puso aquella pobre mujer cuando su hijo le pidió un bocadillo y ella solamente pudo ofrecerle un poco de sopa, bastante diluida en agua. Se te parte el alma al ver como denunciaba con rabia su situación y como afirmaba que daría mil patadas a mil puertas, okupando casas antes de verse en la calle, con sus hijos...
Pero obviamente esta entrada no va para resumiros el programa si no para hacer que os deis cuenta de lo afortunados que sois en vuestra relativa fortuna. Que aunque penséis y odiéis vuestra fortuna cuando no os compren algo o cuando no tengas lo que quieras... Piensa entonces que tienes lo más básico, lo básico y más... Que estás rodeado de lujo. Que tienes más de diez camisetas para elegir, que siempre que quieras puedes abrir la nevera y comer lo que te apetezca... Que pienses que hay gente mucho peor que tú y que, al fin y al cabo y aunque muchas veces no lo creas, eres muy afortunado en tu relativa fortuna.
Pensad sobre ello.
Hasta que volvamos a leernos, besitos de parte de: el príncipe cotillo :D
Entre uno de los casos, se encontraba el de Carmen, madre de familia, con dos hijos que vivía pendiente de la orden de desahucio pues no podía pagar el mes de la casa en el que vivía de alquiler. Durante cerca de 10 días, fuimos testigos de su día a día, de su coraje... De como se vive cuando apenas tienes para vivir.
¿Alguna vez has pensado en lo afortunado que eres? Es precisamente por esto por lo que no podía parar de llorar. porque me sentía culpable, aunque aquella historia no me tocase de cerca. ¿Cómo es posible que haya familias que apenas tengan para comer y tú, te andes quejando cuando te ponen la comida y no te gusta lo que hay? Me sentía culpable, pues yo siempre me fijo en los que tienen más, y nunca en los que tienen menos.
Es realmente duro ver la cara que puso aquella pobre mujer cuando su hijo le pidió un bocadillo y ella solamente pudo ofrecerle un poco de sopa, bastante diluida en agua. Se te parte el alma al ver como denunciaba con rabia su situación y como afirmaba que daría mil patadas a mil puertas, okupando casas antes de verse en la calle, con sus hijos...
Pero obviamente esta entrada no va para resumiros el programa si no para hacer que os deis cuenta de lo afortunados que sois en vuestra relativa fortuna. Que aunque penséis y odiéis vuestra fortuna cuando no os compren algo o cuando no tengas lo que quieras... Piensa entonces que tienes lo más básico, lo básico y más... Que estás rodeado de lujo. Que tienes más de diez camisetas para elegir, que siempre que quieras puedes abrir la nevera y comer lo que te apetezca... Que pienses que hay gente mucho peor que tú y que, al fin y al cabo y aunque muchas veces no lo creas, eres muy afortunado en tu relativa fortuna.
Pensad sobre ello.
Hasta que volvamos a leernos, besitos de parte de: el príncipe cotillo :D
No hay comentarios:
Publicar un comentario